26 de noviembre de 2013

El CEO de Microsoft reveló las razones por las que deja la empresa

Luego de 13 años de trabajo como director ejecutivo, Steve Ballmer, CEO de Microsoft, dio a conocer cuáles fueron sus razones para dejar la empresa.

Fue en agosto que el actual CEO de Microsft - Steve Ballmer -  nos sorprendió a todos anunciando su próximo alejamiento de Microsoft.  Pero las razones que lo llevaron a tomar tal decisión fueron argumentadas recién ahora,  a través de una larga entrevista que Ballmer le concedió a The Wall Street Journal.

Durante la entrevista, Ballmer fue reconstruyendo cuáles fueron las razones que lo impulsaron a tomar la decisión de irse de la empresa en la que trabajó durante 33 años y de la que estuvo al frente los últimos 13. "Quizás soy el emblema de una era antigua y tengo que continuar mi camino" Estas fueron las palabras elegidas por el mismo Baller para describir su propia situación. Ninguna expresión puede precisar con mayor claridad el porqué de su decisión.

Crónica de una renuncia anunciada

En la charla que Baller mantuvo con Wall Street Journal, se fueron dando mayores pormenores sobre las causas de su renuncia. Tanto los directivos de Microsoft  como sus inversionistas hacía tiempo que venían reclamándole a Baller mayor velocidad y celeridad en la transformación de la empresa.  Las exigencias estaban vinculadas a la sensación de que Microsoft había quedado un paso atrás frente a los cambios vertiginosos de la industria: la multiplicación de las redes sociales y el gran auge de los dispositivos móviles.  Y, aunque el CEO coincidía con esta necesidad, no le fue tan fácil llevar este cambio a la práctica.


En primer lugar, sabía que debía realizarse un cambio radical en las estructuras gerenciales para poder enfocar a Microsoft al rubro de dispositivos móviles y servicios online, manteniendo al mismo tiempo al negocio de software fuerte. Fue con este objetivo que trató de establecer un cambio cultural en la empresa, en el que estaba incluido un proceso de reorganización del trabajo de todos los cargos jerárquicos. Estos cambios, como es usual que ocurra, generaron múltiples resistencias entre aquellos que estaban acostumbrados a realizar su trabajo de un modo tradicional, lo que siguió enlenteciendo el proceso.

Todas estas causas se fueron sumando unas a otras, hasta llegar a la decisión final de renunciar. Esto ocurrió, según su propio relato, durante un viaje por negocios a Londres en el cuál llegó a la conclusión de que Microsoft podría cambiar más rápidamente sin él. Luego de reflexionarlo mucho, escribió las cartas de renuncia y le comunicó su decisión a la junta directiva. La renuncia pública, como ya hemos dicho,  se dio a conocer en el mes de agosto.

Por el momento, el ejecutivo se mantendrá ejerciendo sus funciones en su cargo hasta que el nombre de su reemplazante se dé a conocer. Obviamente, ya comenzaron a barajarse posibles candidatos para ocupar su puesto, como por ejemplo Stephen Elop (de Nokia) o el Alan Mulally (CEO de Ford). ¿Quién se quedará con su sillón? Aun no lo sabemos.